Y es que si el martes no me voy de fiesta, no me sabe a fin de semana. Hoy (mañana) llego de algún bar donde ver a gente que apenas es, todavía, y muy a fuerzas, parte demi generación, y sopesandolos desde lejos, sinto su equivocación que es la mía, ya mas tardía que la de os semejantes sudorosos, desmayados unos, qye reposan en el suelo. Estoy bien. Se levanta y vuelve a caer, aunque yo ayudo sin soltar mi cerveza bien asida por la mano derecha, que es la fuerte.

Hoy (mañana) toca ver a Lin May.
Si, Lin May.

Martes comenzó con una llamada a (des)tiempo diciendo "uy uy uy" y yo contestando "claro..."
Nada raro. Todo usualemente jodido y una ultrasonica cantando cumbia.

Que mal estamos, pero que bien que lo pasamos.